CRÓNICA
Emociones que detienen el paso en La Albufera de Valencia
La exposición de fotografías de Juan Solbes y Vicente M. Muñoz Gras

Una de las fotografías de “Emociones: La Albufera de Valencia. Desde dentro”. Fuente: Miriam Espinosa
Escribe Miriam Espinosa
Valencia 5 de mayo de 2025
La exposición “Emociones: La Albufera de Valencia. Desde dentro”, se despliega discretamente en el pasillo de entrada del Fnac, por la calle San Vicente, en Valencia. Para quienes han crecido admirando y formando parte del humedal, este momento se vive de forma más intensa. No es solo un paisaje bonito y generador de vida, también es el pulmón de los valencianos y un símbolo del orgullo de pertenecer a esta tierra que ha acompañado silenciosamente cada etapa de nuestras vidas.
A simple vista, el lugar parece una zona de tránsito sin importancia, donde nadie se detiene y todo el mundo pasa con prisa, centrado en sus compras. Al principio, uno podría pensar que esas fotografías colgadas en la pared son solo imágenes antiguas olvidadas, colocadas ahí casi por accidente. Basta con un instante de atención para descubrir que cada marco guarda una historia, imposible no pararse a ver qué trama esconden las imágenes. Juan Solbes, el fotógrafo que firma esta colección, junto al barquero Vicente M. Muñoz Gras, no se limita a mostrar paisajes, invita al visitante a vivir La Albufera desde la piel, el corazón y la memoria.
Son 26 las imágenes que componen la muestra y no siguen un recorrido lineal ni temático, sino emocional. Cada imagen representa una emoción, un sentimiento. El éxtasis se esconde tras el vuelo de una garza cazando su presa. La paz, en una puesta de sol de invierno en la que las barcas aprovechan para verlas desde dentro. La incomprensión está reflejada en una construcción de cemento en medio del Parque Natural, y la confianza, se adivina en la pesca de un cormorán tratando de tragar una llisa, entre otra veintena de emociones más.
Esta exposición forma parte del libro “La Albufera de València. Desde dentro”, obra publicada por Editorial Sargantana, Solbes y el barquero Vicente M. Muñoz Gras que nos proponen un recorrido muy personal por algunos de los rincones más bonitos del humedal, lleno de sensibilidad y mirada propia.
La obra llega en un momento clave para La Albufera, en que todos los expertos están a la expectativa de saber cuales son los daños y consecuencias después de la Dana, y en el que se hace más necesario que nunca poner en valor su riqueza ambiental y cultural, así como reflexionar sobre la urgencia de su protección, siendo esta una de las reflexiones clave de la exposición. El visitante no solo observa, dialoga con el paisaje, se reconoce en la emoción que transmite cada imagen y, quizá, sale de la sala con una pregunta: ¿qué puedo hacer yo por proteger este lugar único?
La exposición, instalada en la Fnac de San Agustín, es un homenaje a la vida cotidiana de este humedal, pero también una llamada de atención. Cada fotografía es, a la vez, celebración y advertencia, un recordatorio de que La Albufera es un paraíso frágil, tan vulnerable como fascinante.